Hablamos en A Escena Valencia con el actor Fernando Cayo sobre "Los lunes al sol", un exitoso montaje dirigido por Javier Hernández-Simón, que podremos ver en el Teatre Principal de València los días 9 y 10 de noviembre.
A.E.: Gracias Fernando por estar en A Escena Valencia. Me gustaría preguntarte por el proceso de ensayos de "Los lunes al sol".
F.C.: Han sido casi dos meses de ensayos. La producción es de G&G Producciones, que son Carmen, Graciela y Tania. Aparte de unas productoras maravillosas, son unas distribuidoras muy potentes. Ellas se han armado todo un equipo entorno a Javier Hernández-Simón, que es el director. Han conformado un equipo muy sólido en el que muchísimos programadores de toda España han confiado, incluso antes de tener el espectáculo estrenado. Eso ha hecho posible el armar esta gira tan estupenda.
A.E.: ¿Cómo surge "Los lunes al sol"?
F.C.: La obra surge de la versión que ha hecho Ignacio del Moral, que es coautor, con Fernando León de Aranoa, del guion de "Los lunes al sol". Ignacio del Moral, que es dramaturgo también, junto con Javier Hernández-Simón, que es director de la función, han hecho la adaptación. Hemos estado ensayando dos meses muy profundamente. Javier es un director muy concentrado y muy profundo. Ha quedado un espectáculo del que estamos muy orgullosos. Divertido por momentos, emocionante por otros. Con una escenografía, un espacio escénico y una música muy bien armada. Con Juan Gómez-Cornejo, el maestro de la iluminación de este país; con Ricardo S. Cuerda con una escenografía muy sugerente, muy plástica; Álvaro Renedo con la música y el espacio sonoro.
Es un equipo espectacular y lo sigue habiendo en gira. Con Marcial Álvarez, José Luis Torrijo, César Sánchez, un veterano de la escena, maravilloso; Fernando Huesca, Fermi Herrero, Yune Nogueiras y Lidia Navarro, que son maravillosas también... Con una canción que se ha compuesto específicamente para un momento de la función muy emocionante y muy bonito, cantada por Yune Nogueiras. La verdad es que estamos muy contentos.
A.E.: Viendo el dossier, las fotos del propio espectáculo, es imposible no echar la vista atrás y pensar en la película, que además sigue estando de plena actualidad. Seguimos viviendo una situación de reivindicación de las personas frente a un entorno laboral muy complicado.
F.C.: Uno de los comentarios que más se ha repetido es que no tiene nada que ver con la película. La historia es la misma y la construcción de la historia es la misma, pero Javier Hernández-Simón ha hecho de este espectáculo una maquinaria esencialmente teatral y muy potente. Con una energía muy particular que la hace diferenciarse de la película. Hay una utilización de los recursos teatrales muy eficaz y muy potente y emocionante. Si ves la película y sales de ver el espectáculo realmente te da igual porque has visto otra cosa. Has visto algo completamente distinto.
A.E.: En tu caso, lo sé porque lo hemos comentado otras veces, te gustan los personajes con intensidad, que sean energéticos. Eso es muy tuyo también. ¿Qué me puedes contar de tu personaje?
F.C.: Santa es un soñador, un revolucionario. Es un tipo que está en el paro, igual que el resto del grupo de amigos del que trata la historia. Es el que mantiene la llama de la lucha, del combate. "No vamos a doblegarnos". "No vamos a dejar que nos domen". Hay una frase que en la función dice que nos ganaron pero no nos domaron. Y es algo que lleva a rajatabla. Tiene mucho que ver con estas figuras de luchadores sindicales que yo vi en mi juventud. Conserva ese aire revolucionario. Tiene, por otro lado, una parte muy divertida. Es un tipo con sus fallos, con sus carencias, con su parte más chocante y divertida. Eso también hace que sea querido por el grupo de amigos. Es un poco el que hace y sigue apoyando a sus amigos. Es un tipo entrañable y muy gustoso de interpretar.
A.E.: Ahora que se ha estrenado la función. ¿Qué comentarios y reacciones te han llegado?
F.C.: Han sido buenísimos. Hemos puesto en Instagram algunos post con comentarios sobre la función. Son excelentes. Estamos muy contentos. Todo el mundo la recibe muy bien. La gente sale de la función muy emocionada y muy tocada. Hicimos una función en Fuenlabrada, la gente nos paraba por la calle y nos decía que les había divertido y emocionado profundamente. Son dos rasgos esenciales de la función. Es divertida, porque a través del humor se intenta salir de situaciones difíciles. El recorrido que se cuenta, el suicidio de Amador, de uno de los personajes, cómo se apoyan mutuamente. La importancia de estar juntos. Eso a la gente le llega muchísimo.
Muchas gracias a Fernando Cayo por esta entrevista para A Escena Valencia.
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