Hablamos con el actor Jose Navar, compañero y amigo con el que tuvimos el placer de hablar en A Escena Valencia con el estreno de 'Anastasia', uno de los mejores musicales de las últimas temporadas en la cartelera madrileña. Tras el éxito de 'Full Monty', Jose Navar nos espera en 'Los Puentes de Madison', el exitoso musical ganador de dos Premios Tony, basado en la mítica película de Clint Eastwood y Meryl Streep y en su popular novela. El propio Jose Navar nos cuenta más detalles en esta entrevista para A Escena Valencia. Podéis ver el musical en el Teatro EDP Gran Vía, un plan de acierto seguro.

A.E.: ¿Cómo te llegó este proyecto?

J.N.: Pues realizando la obra de Full Monty en Madrid, Geronimo Rauch vino a ver la función. Días después me llamaba por teléfono para proponerme hacer una audición. Tiempo después nos vimos, se realizó esa audición…y aquí estamos! Siempre le estaré agradecido por ese acto de generosidad y confianza.

A.E.: ¿Cómo ha reaccionado el público que ya conoce la película, y más una historia tan recordada como la de "Los puentes de Madison"? ¿Se va a encontrar algo similar a la película, o al ser un musical y con las canciones es una experiencia totalmente diferente?

J.N.: Siempre que hay una temática [una novela] y se hace una obra de teatro, o en este caso una obra de teatro musical y además una película tan exitosa, existe el peligro de pensar "¿por dónde van los tiros?"... En este caso, la historia de Robert y Francesca es tan concreta, que se puede decir que el musical creado por Marsha Norman, una señora maravillosa, con un currículum impresionante y norteamericana, está basado más en la novela que en la película. Cuando la película fué ofrecida a varios cineastas, fue Clint Eastwood el que la dirigió y protagonizó junto a Meryl Streep, y todo el mundo que haya visto la película, sabrá que está centrada absolutamente en ellos dos. Se basa en los tres o cuatro dias que ellos dos pasan juntos. La novela lleva un proceso lineal. Y en esta adaptación teatral, es el componente dramático basado en la novela el que se resalta y consigue. Introduciendo personajes como el marido, los hijos, vecinos etc.

Yo conocía la novela, y había visto el Musical así como la película. Es una oda al amor. Eso me gusta y me sorprende a partes iguales. Robert J.Waller el autor de la novela, en su prólogo dice: “ En un mundo cada vez más insensible, todos hemos desarrollado caparazones contra la sensibilería. No sé bien dónde termina la gran pasión y empieza el sentimentalismo. Pero nuestra tendencia a mofarnos de la gran pasión y tildar de sensibileros los sentimientos genuinos y profundos, dificulta la entrada al reino de la delicadeza”. No creo que se pueda expresar mejor…. Pues de eso habla esta obra de Teatro que contamos cada día.

A.E.: ¿Cómo ha sido el proceso de ensayos?

J.N.: El proceso de ensayos ha sido básicamente como todos los procesos de ensayos de una obra de teatro. En este caso, de una obra de teatro musical. Con muchísima ilusión, arrancar con muchas ganas. Poniendo todo el corazón y el alma en un proyecto que desde el primer día creímos que es muy bonito. Y también hay que destacar que apoyando mucho al principal eje de este montaje que son los dos protagonistas, Nina y Gerónimo Rauch, y sus alternantes, que son Julia Möller y Carlos Solano. Apoyándolos mucho a ellos, porque llevan el eje fundamental. Los demás personajes que estamos a su alrededor somos como unas visagras que complementan su trabajo al servicio de contar esta hermosa historia de la mejor forma posible.

A.E.: ¿Qué reacciones y comentarios te han llegado después del estreno?

J.N.: Están siendo absolutamente magníficos. Todas las reseñas, todas las críticas, algunas a título personal, que voy leyendo publicadas y pregunto... Está siendo todo muy bueno. Está gustando mucho. La gente sale muy emocionada del espectáculo, muy asombrada. Con un grandísimo buen sabor de boca. No puedes pedir más. Como digo siempre, que alguien se tome su tiempo para pasar dos horas contigo y gastar su dinero para pagar una entrada. Eso me da el mayor de los respetos. Ese acto de generosidad del público hace que hagamos nuestro trabajo al 100% de energía, para así corresponder a ese acto de generosidad. A esa liturgia, de la que hablaba Peter Brook, del encuentro entre el espectador y actor. En ese sentido, del mismo modo que decía cuando hacíamos 'Full Monty' el año pasado, hacer sonreir, es muy importante. Es un regalo de la vida. En este caso, conmover durante dos horas y media a alguien que ha decidido generosamente venir a verte es un privilegio. La gente joven y la gente mayor te dicen cosas tan bonitas que da hasta rubor repetirlas. Está gustando mucho. Estoy muy contento.

A.E.: Quería preguntarte por la parte que es más desconocida para el público, las canciones de este espectáculo. ¿Qué nos puedes avanzar sobre los temas musicales?

J.N.: Es la joya de la corona de este musical. Robert Jason Brown es el autor de la música. Cuando se estrenó en Broadway, no es de esos grandes musicales que tienen tanto éxito como 'Wicked', 'Hamilton'... es un musical aparentemente muy sencillo y resulta que se llevó dos Premios Tony, uno como Mejor Música, y el otro como Mejor Orquestación, es decir, que supieron detectar que aunque el producto final no fue un gran éxito de público, lo que podemos entender como “éxito “ por no estar varias temporadas llenando cada día, sí supieron reconocer que la música es absolutamente sobresaliente.

Nosotros llevamos una orquesta con músicos en directo, hay cuerdas, guitarras, percusiones…. La música es una combinación de música clásica, folk, country... tiene unas baladas, unos temas absolutamente espectaculares. Maravillosos.

Y además, el hecho de que Nina, Gerónimo Rauch, Julia Möller y Carlos Solano, sean los protagonistas de esta función, exige de manera absoluta e inequívoca que los intérpretes sean unos cantantes sobresalientes, porque de otro modo, no podrían hacer este musical. Todos ellos tienen una partitura delante impresionante, y de una exigencia vocal atroz. Las canciones son maravillosas, cuando tengo tiempo me bajo con la orquesta para oírlos. Es un placer, un regalo y un honor tener a todos estos músicos cada día bajo la batuta y dirección del maestro Gerardo Gardelín.

A.E.: Quería preguntarte por tu personaje...

J.N.: En el teatro musical, es frecuente que haya actores que hagamos la titularidad de un personaje, y luego hagamos el sustituto de otro personaje, para que así haya una rotación y el número de funciones no agote tanto. Por eso, menciono tanto a Nina y Gerónimo Rauch, y a Julia Möller y a Carlos Solano, porque la exigencia es muy alta. Siempre digo que hablar de teatro musical es hablar de la Fórmula 1, de la primera división del Teatro. Eso en Estados Unidos y en Londres lo tienen clarísimo, aquí poco a poco se va entendiendo.

La exigencia que se le requiere al actor es altísima, no solo como intérprete, sino además como cantante o a veces como bailarín. Tienes que estar en una perfecta forma física. Ten en cuenta que tienes funciones 9, 10 y hasta 11 veces a la semana. Ahora que además nos acercamos a la Navidad, hay semanas de 11 funciones, por lo que siempre existe esa figura dentro del elenco, de actores que hacemos dos personajes, un titular y un sustituto. En mi caso, hago el personaje de Charlie, el vecino de Francesca, los cómplices y amigos de la familia; y por otro lado, hago el personaje de Bud, que es el marido de Francesca y padre de sus hijos. Del personaje del marido, el actor titular es Manu Rodríguez, actor estupendo y compañero maravilloso.

A.E.: Además, esta temporada hay un gran auge de los musicales en la cartelera madrileña...

J.N.: Creo que nos retrotraemos al 2018, cuando en Madrid se superaron los 16 musicales, 4 o 5 de factura propiamente española, como 'El Médico', '33’ también los de franquicia como 'El Rey León' o ‘Anastasia’. Me parece genial que se generen productos nacionales. Este año nos vemos en la misma tesitura. Pienso, que a veces, esto puede ser una moneda de doble cara, que tiene su peligro. Tal proliferación de teatro musical se ha convertido en un plato de mucho gusto, al que ahora se apunta el más espabilado. Parece que el teatro musical da imagen de que es un producto económicamente rentable y muy funcional, y como persona que se dedica a esto y viendo la trayectoria, y cómo se va desarrollando todo esto, mi miedo es la injerencia que a veces se está empezando a cometer en el teatro musical. Hay quien se apunta a hacer cualquier cosa.

Esta injerencia a la que me refiero, no es con respecto a los artistas. Hay que destacar la gran preparación de las nuevas generaciones de intérpretes .Ante una audición dónde te juegas un papel no hay trampa ni cartón. O estás a la altura de lo exigido o no hay nada que hacer…otra vez será. Lo que me da miedo y no me hace ninguna gracia, lo digo más a niveles de producción, es ver, cómo empresarios inmobiliarios, de restauración, abogados, se meten a productores de teatro. Y el problema para mí no es que hagas tu aportación económica, incluso la Iglesia lo hizo cuando se produjo '33 el Musical'. Cuando hablo de injerencia, es cuando entran a establecer su criterio artístico de cómo deberían hacerse las cosas. Suponiendo qué lo tengan, que a veces es mucho suponer…. Ahí ya es cuando empezamos a tener problemas. Cuando el ayudante de repente dirige, o el iluminador dirige, o el escenógrafo dirige… hay una injerencia de otros oficios a la Dirección, que me parece muy peligrosa. Me hace recordar esa escena de 'Hamlet' que les dice a sus amigos 'tocad la flauta'. Si creéis que es tan fácil ... saber tocar el alma humana.

Que cada uno se dedique a su trabajo.

Hablo mucho con los jóvenes actores, y siempre les digo lo mismo: Es una obra de Teatro, contamos historias. Todo lo demás es complementario. Cantar, bailar…. No es secundario! Complementa nuestra historia, nuestra forma de narrarla.

Como decía Peter Brook, aunque el espacio estuviera vacío. Lo que no puede faltar nunca es un intérprete que nos cuenta algo, una historia que nos conmueva, y un público que está sentado y observa y se conmueva. No estamos aquí para cambiar el mundo, pero conmover a alguien con una historia ajena es un trabajo que merece la pena. Y el mayor de los respetos. Cuando hablo de injerencia, a esto me refiero. Buscar la ‘calidad’…nadie sabe con exactitud lo que significa esa palabra, pero todo el mundo la percibe.

Gracias a Jose Navar por estar en A Escena Valencia. Nos espera en el Teatro EDP Gran Vía con 'Los Puentes de Madison, el Musical', un plan infalible para disfrutar estas Navidades y empezar el 2023 a ritmo de un premiado musical.

Venta de entradas: Los Puentes de Madison, El Musical - Grupo Smedia