Desde A Escena Valencia comenzamos el 2021 con intensidad y os ofrecemos la segunda parte de la entrevista con el periodista y comunicador Juan Ramón Lucas, que cada noche nos trae la actualidad informativa a través de "La Brújula" en Onda Cero. Además de su primera novela, "La maldición de la casa grande", hemos podido conversar con él sobre una obra que firma junto a Sandra Ibarra y Javier Fernández Aguado, "Hablemos sobre felicidad".
#Hablemossobrefelicidad | En esta obra, Juan Ramón Lucas, a través del diálogo con Sandra Ibarra, presidenta de la Fundación que lleva su nombre y activista desde hace 20 años frente al cáncer, y Javier Fernández Aguado, uno de los pensadores contemporáneos más reconocidos y referente en el mundo del management, abre el camino para que cada uno pueda construir su felicidad. Un libro que desde A Escena Valencia os recomendamos y que nos ha hecho reflexionar y profundizar en cuáles son las claves en la búsqueda de la felicidad en nuestra vida diaria.
"Hablemos sobre felicidad" es una obra llena de frases y conversaciones muy reveladoras, con tres puntos de vista distintos sobre qué es la felicidad y cómo encontrarla. Es una obra a tres en este caso, junto a Sandra Ibarra, que vive la vida con mucha intensidad y lo plasma con sus palabras en este libro, y con Javier Fernández Aguado, que aporta la parte más técnica. Sandra aporta la parte vital, porque además lo vivió en primera persona ¿Cómo nace la idea de documentar estas conversaciones y crear esta obra?
J.R.L.: Nace de una idea de los tres y de una conversación de Sandra. Lo que vivimos es que un día estaban hablando ellos dos sobre felicidad y yo estaba de testigo. Sandra le dijo a Javier "tu que escribes libros sobre casi todo, por qué no escribimos un libro sobre felicidad". Yo les dije que prefería que hablaran ellos, porque estábamos teniendo una conversación entre los tres. Y si pudiera ser un texto escrito entre los tres mejor. Ahí nace el proyecto de "Hablemos sobre felicidad". Un proyecto que nace durante una conversación en la que Sandra habla de un libro, algo que tiene que ver con entrevistas, una entrevista entre ellos, y lo que hicieron fue varias conversaciones, hicimos una especie de índice, centramos los capítulos, y lo hicimos así.
De hecho tiene muchos momentos. Lo tengo muy subrayado, porque hay frases y momentos que de verdad reflexionas. Te hace pensar. La gran pregunta: después de escribir este libro, de hablar entre vosotros. Sé que el libro habla de ello y es difícil de definir. ¿Qué es para ti la felicidad?
J.R.L.: En el libro se ve y trasciende, es el equilibrio y disfrutar de sus momentos. La felicidad no es una meta, es un camino, eso lo dice Javier Fernández Aguado. Hay momentos en los que te encuentras muy bien. No se trata de buscar un estado de ánimo permanente. Estar atento a los estímulos positivos y a las cosas que disfrutas. Procurar estar en equilibrio y en armonía con uno mismo.
Todas las semanas podemos escucharte en "La Brújula" de Onda Cero y leerte en la web de Onda Cero a través de "El Norte de Lucas". Además, recientemente has sido galardonado con el Premio Antena de Oro 2020 por tu labor radiofónica en este espacio. Estos días estamos viviendo una realidad muy cambiante, un contexto acelerado por esta situación. ¿Cómo ha sido para ti durante todo este período, desde marzo, llevar el espacio de "La Brújula", y con ese contexto tan cambiante? Es como estar siempre en el momento presente.
J.R.L.: La realidad cambiante es el universo en el que yo me muevo. Cuento cada día las cosas que pasan. Cuando me enfrento a una escaleta todos los días, al esquema del programa, es una realidad cambiante. No tiene que ver con el día anterior. Y a lo mejor lo que estamos contando tampoco es lo que habíamos calculado que íbamos a contar. Es cierto que ahora las cosas van más deprisa, o tenemos esa sensación. Es mi trabajo, llevo 40 años haciendo información, y siempre ha sido así. La realidad cambia constantemente, y el oficio es saber encontrar el cambio, y en lo posible orientar a la gente para que lo pueda entender.
Desde que estudiaba periodismo siempre has sido un referente. Estoy pensando ahora en programas que he visto tuyos: "La naranja metálica", "En noches como esta", "Todo Madrid". Me dejo muchos por nombrar al repasar tu trayectoria. Eres un comunicador que vive la vida con intensidad, tú lo has dicho muchas veces en entrevistas. En estos programas hemos visto otras facetas tuyas, quizá más personales. Desde probar una moto en Telemadrid; o en "Todo Madrid" sumergirte y contar de primera mano el problema que hubo con el chapapote; en "Noches como esta", entrevistas con invitados fantásticos, de sociedad, de cultura. Presentaste también un programa sobre emprendedores, "Código emprende". Son muchas facetas y muchos tipos de programas. ¿Qué es lo que más te apasiona a la hora de escoger un proyecto, o de presentarlo, o de crearlo? ¿Cuál es el motor para ti?
J.R.L: No lo sé... en este oficio, como sabes bien, no hay que despreciar casi nada, salvo que entre fuera de tu ética. Siempre he procurado hacer mis proyectos o lo que me ofrecen. ¿Cómo se hace tuyo un proyecto? Aportando lo que te gusta y sabes hacer. Me gusta meter las narices donde puedo. Contar las cosas en primera persona. Si hablo del chapapote, me sumerjo en el fondo del mar. Si hablo de incendios, me voy a ver a unos bomberos y me meto con un traje especial en un sitio donde ellos ensayan ignición a 600 grados. Me gusta vivir la vida fuera del trabajo también, y con el trabajo tengo oportunidad de descubrir algo nuevo, ahí encuentro un ecosistema en el que me encuentro muy bien.
Además te encanta el deporte. Bucear, participar en una carrera solidaria... ¿Qué te aporta el deporte en tu día a día?
J.R.L.: Superación. Es como todo lo que te cuesta. Es una forma de mantenerte sano. También es una forma de superarte a ti mismo. De ir un poco más allá. En Valencia he corrido el único media distancia triatlón que he corrido en mi vida, que fue el campeonato de España. Casi muero, porque fue en junio de hace cuatro años, a 36 grados. Hacerlo todo del tirón es duro. Ahora estoy metido en carreras de caballos...
Lo sé, quería preguntarte sobre eso...
J.R.L.: Es resistencia. Es con una yegua que tenemos, que la hemos criado desde pequeñita, es una maravilla además. Son carreras de resistencia donde no gana quien llega primero, sino quien llega a caballo en mejores condiciones. Es un reto, llevo un par de ellas. Estoy disfrutando mucho. La vida es ir aprovechando las oportunidades que a uno se le presentan, y sacar todo el jugo que puedas. Y si no, intentas buscarlas. No es tanto la frustración de hacer lo quiero, que no siempre se puede, provoca frustración. Es más aprovechar las cosas que se te ponen delante. He tenido la suerte de poder ejercer el oficio que me gusta. Eso me ha permitido dedicarme a cosas que me gustan. Vivir las cosas en equilibrio, contigo mismo.
Sé que te encanta el Norte, con esos paisajes maravillosos. Además de compartir tu afición con Sandra Ibarra por montar a caballo y participar en carreras de resistencia, ¿Cuándo empezó ese encuentro con la naturaleza, con los caballos?
J.R.L.: Asturias es mi tierra. Es donde nacieron mis padres, donde viví yo de pequeño. La afición a la naturaleza, a los caballos, viene desde mi infancia. La afición al caballo es más adulta, y corresponde a un amigo rejoneador, Sergio Vega. Él me enseño a querer y tratar a los caballos. A partir de ahí, seguí enganchado y me traje uno que yo tenía en Madrid. Contacté con un grupo de gente, con amigos que tenían caballos también. Nos fuimos haciendo con "capitalito" de caballos. Estoy en Madrid en una Asociación que se llama "Salva a un caballo"... y me traje a un caballo que había sufrido maltrato y abandono. Ahora tenemos dos potritos pequeños, en total cinco. En un prado grande, donde tenemos libertad o semilibertad. Asturias es el lugar en el que intento vivir, aunque vaya todos los días a trabajar a Madrid...
Para escribir imagino que también es un sitio en el que encuentras tu paz.
J.R.L.: Decía García Márquez que para escribir por la mañana, y por la noche bares y amigos. Escribir requiere concentración y silencio, pero esa concentración no está en función de la atmósfera que tienes alrededor sino de las ganas que tengas de escribir. Yo escribo muy bien aquí, pero "La Maldición de la Casa Grande" se escribió aquí, en Fuerteventura, Madrid, en Cartagena gran parte de la novela, en Valencia, en Denia... Ahora estoy en la segunda reescritura de la nueva novela. Es una cosa muy difícil porque tienes que reconducir cosas, tienes que aportar... Hoy por ejemplo me he puesto a escribir, y me lo he dejado porque no me hallaba... Estoy delante de un paisaje precioso... El paisaje idílico, estar en una isla frente al mar... La inspiración es el trabajo constante y que tengas la idea amarrada y capacidad para soltarla. No me afecta demasiado, sí me afecta a la hora de generar el ánimo, de encontrar la felicidad... Para escribir mi visión.
Muchas gracias a Juan Ramón Lucas por estar en A Escena Valencia hablando de "La maldición de la casa grande" y "Hablemos sobre felicidad".
J.R.L.: Gracias a ti.
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