Hongaresa de Teatre cumplía este pasado 2020 un cuarto de siglo de trabajo ininterrumpido de escritura teatral y puesta en escena. La pandemia impidió la celebración de su 25 aniversario, pero en este nuevo año, ha llegado el momento de festejarlo.

La compañía valenciana fue fundada en 1995 por Lola López, Lluïsa Cunillé (Premio Nacional de Literatura Dramática 2010) y Paco Zarzoso. A lo largo de su trayectoria, Hongaresa ha estrenado más de una veintena de piezas, reconocidas con galardones como los premios de la Crítica de Barcelona, Marqués de Bradomín, SGAE, Enrique Llovet y Max Aub y representadas en toda la geografía española, así como en Argentina, Chile, Uruguay y Colombia.
 
Este próximo 15 de enero arranca el brindis por la tenacidad de Hongaresa de Teatre en el Centro Cultural Mario Monreal de Sagunto, donde se presentará el libro Paco Zarzoso. Teatro escogido (1996-2020), de Arola Editors. La representación de "Umbral" cambia de horario el sábado, será a las 19:00h.

 
“Elegidos por su autor, estos textos transitan desde recónditos recovecos urbanos hasta la ruralidad vaciada para conformar un verdadero corpus”, avanza el coordinador del libro, Albert Arribas, quien ha definido al autor valenciano como “una de las voces más aguzadas y singulares del teatro contemporáneo hispánico”.

 
La presentación del libro de Zarzoso correrá a cargo de su autor y de Lola López. Les arroparán el dramaturgo y director Xavi Puchades, todo un referente del teatro en València que ha escrito el prólogo del libro; el profesor de literatura y poeta y espectador de muchas de las obras de Hongaresa Pedro Luis Alonso; y la concejal de Cultura del Ayuntamiento, Asun Moll, ya que el consistorio ha respaldado a la compañía durante todos estos años. La última muestra de ese respaldo es el apoyo a la publicación de este libro recopilatorio.
 
El mito fundacional de la dramaturgia de Zarzoso radica según Puchades, precisamente, en el desmantelamiento de la industria siderúrgica de Puerto de Sagunto: “un pueblo expulsado abruptamente del progreso y abocado a un futuro incierto”. En este tiempo “detenido y oscuro”, es cuando surgen los primeros personajes del autor.
 
Desde sus orígenes, su obra es tragicómica, “crónicas negras con luces de feria ante las cuales el espectador, que muchas veces asiste como un invitado ficcionalizado, no sabe si reír o llorar”, apunta el prologuista.


En suma, en palabras de Albert Arribas, “casi un cuarto de siglo de escritura escénica profundamente comprometida con la ebriedad de las tablas, sin desatender jamás la sordidez de nuestro desaliñado presente y el patetismo con que los aviejunados mitos deambulan por sus chillonas atracciones de vanidosa feria”.