Meridional Producciones nos propone un viaje a una historia llena de contrastes, donde se funden las visiones de Oriente y Occidente. Los esclavos de mis esclavos presenta a tres cooperantes secuestrados en una cueva en pleno conflicto afgano. Su único vínculo con el mundo exterior, mientras esperan poder salir de allí con vida, es una mujer afgana vestida con burka que les lleva agua y comida.

Uno de los logros de este montaje, además de su indudable calidad, es su punto de vista. En ningún momento toma partido, sino que abre un abanico de posibilidades al espectador para que sea él el que saque sus propias conclusiones. El reto no era fácil ante un tema tan actual y siendo un tipo teatro social muy comprometido. Los esclavos de mis esclavos se abre camino con solvencia hacia una historia de miserias cotidianas, donde hay cabida para el drama, pero también momentos para el humor, muchas veces implícito en las tragedias de unos personajes al límite y muy bien dibujados. Álvaro Lavín, Fran Cantos, Elvira Cuadrupani e Inés Sánchez forman un reparto de lujo en el escenario con el que el espectador conecta en todo momento, gracias también a un inteligente uso de las proyecciones, una puesta en escena austera y efectista, y un texto y una dirección muy solventes. Julio Salvatierra y Álvaro Lavín vuelven a demostrar su buen hacer y su oficio con este montaje. No os lo perdáis. Actualmente en gira por todo el territorio nacional, y del 10 al 20 de mayo en la Sala Negra de los Teatros del Canal de Madrid.

Los esclavos de mis esclavos es una obra recomendada por la Red Española de Teatros.