Hablamos con el actor José Olmos sobre el estreno de 'Creonte, mon amour'. Este fin de semana no te pierdas el estreno absoluto en Artea Espai, hasta el 17 de diciembre.

A.E.: ¿Cómo nació la idea de hacer un espectáculo sobre Creonte?

J.O.: La idea era hacer un trabajo sobre el personaje de Creonte. Viene sobre todo por lo que está pasando en el mundo. Ya lo tenía en la cabeza al ver las noticias, mirar Twitter. Ver cómo está el mundo literalmente. Tenía inquietudes sobre cómo hablar de esto en una obra de teatro. La casualidad también. Estaba haciendo un curso de reciclaje y una de las escenas que trabajábamos era el personaje de Creonte. Un diálogo entre Creonte y Antígona. 

Como que empiezan a sumarse cosas. Pues esto por aquí, si se interpreta por allá.... A partir de ahí y a poco que investigas sobre el personaje de Creonte es como un cuñado. Fue el cuñado de dos reyes, de Laio y de Edipo. Diciéndoles a todos cómo tienen que gobernar. De repente, en 'Antígona' gobierna él y hace todo lo que dijo que no se tenía que hacer. Esto es lo que pasa ahora. Todos tenemos muy claro cómo se hacen las cosas pero el mundo está así por los que mandan. Se supone que han recibido una formación parecida a la nuestra.

A.E.: ¿Qué puede esperar el público que vaya a Artea a ver el espectáculo?

J.O.: Se van a encontrar a un personaje cotidiano que de repente se ve metido en una chaqueta que le viene demasiado grande. Un trabajo que le viene grande y que empieza a buscar su autoridad de alguna manera dando guerra. No es la tragedia de Sófocles. Que no se la esperen aquí. Una vez desnudas a este personaje descubres su patetismo. Ves una comedia ácida con tintes trágicos. Es inevitable por la inspiración del personaje. Básicamente una comedia ácida con mucho tema para reflexionar y pensar después de verla, para irse de aquí reflexionando sobre si esto sí o no.

A.E.: ¿Cómo ha sido el proceso de ensayos?

J.O.: Es curioso porque como te dije salió de un taller y de un trabajo con este personaje de Creonte. Me lo traje a casa para seguir entrenando actoralmente, no tenía nada a la vista como actor y quería mantener el cuerpo entrenado. El cuerpo y la mente activos. Mientras iba probando cosas en casa, iba surgiendo la forma de contar la historia desde el punto de vista de Creonte. Era una cosa muy propia del trabajo que hice en casa. 

Cuando Artea nos dio la posibilidad de estar estas fechas y buscamos gente, aportaban al proceso, incluso una mirada externa. François Moretti se apuntó en seguida para todo el tema de luces. Félix Duart para el tema de ambiente sonoro. Luego los amigos y colaboradores con los que suelo contar y te aportan su mirada externa. Está siendo un proceso de creación en familia. Estamos muy contentos con el proceso. 

Solo me queda animaros a venir a Espai Artea a pasarlo bien y a disfrutar de esta reflexión.

Muchas gracias José Olmos por esta entrevista para A Escena Valencia.