Atalaya es una de las compañías teatrales más prestigiosas, longevas y premiadas del territorio nacional. Con giras internacionales y obras recientes que siguen recibiendo galardones, como su visión de "La Celestina, la tragicomedia", que nos cautivó cuando pudimos disfrutarla en el Teatro Olympia. Ricardo Iniesta y su elenco componen un cautivador y onírico mosaico de imágenes y simbolismo con "Así que pasen cinco años". El llamado teatro "imposible" de Lorca consigue con montajes como este convertirse en realidad con un fuerte aplauso en el patio de butacas.

El respeto a Lorca y a su esencia se respira en toda la pieza, haciendo una labor escénica y pedagógica de acercamiento del texto y el verso al gran público. Estamos ante una obra de gran complejidad, un reto que la compañía Atalaya supera con nota llevando la imaginación de Lorca al escenario con todos sus personajes e historias y dotándolos de vida y pasión a raudales. Merece un punto y aparte la mágica y magnética iluminación de Miguel Ángel Camacho, generadora de atmósferas y de imágenes de gran fuerza y belleza. La escenografía móvil construye momentos de potencia visual, entre el surrealismo, el expresionismo, los sueños y un ritmo atmosférico que no decae en toda la pieza, con escaleras infinitas, telas colgantes que parecen volar, armarios llenos de espejos y unos personajes apoyados en un vestuario acorde, junto a un trabajo de cuerpo, gesto y máscara depurado y detallado.



El montaje "Así que pasen cinco años" tiene un significado especial para la compañía andaluza, con más de 30 años en los escenarios y Premio Nacional de Teatro 2008, ya que fue su primera obra. Ahora, Ricardo Iniesta y la compañía, abordan el reto desde una perspectiva llena de sabiduría y oficio juntando a dos generaciones de intépretes de la compañía en el escenario: Elena Amada Aliaga, Jerónimo Arenal, Manuel Asensio, Carmen Gallardo, Silvia Garzón, José Ángel Moreno, María Sanz, Raúl Sirio Iniesta y Rául Vera.

Esta nueva interpretación de los sueños y el mundo de Lorca es una coproducción de Atalaya y CDN. Se podrá ver en el Teatro Principal de Valencia hasta el domingo 25 de febrero. No te la pierdas.